In Memorian: Kurt Cobain

“Es mejor extinguirse, que apagarse lentamente” Kurt Donald Cobain, Carta póstuma de su “suicidio”, 5 de Abril de 1994.
¿Has visitado ese lugar? Cuentan que dentro, el dolor y las penas se van. No existes más que tú y tu mente, la cual no divaga. No sientes, ni te inmutas. ¿Te gustaría visitarlo?
Primero, quisiera saber cuánto dolor sientes.
¿Te hace falta amor de padres, hermanos, pareja? ¿Te han engañado tus amigos? ¿No tienes amigos? ¿Eres quien, se sienta en clase y es señalado y observado por todos? ¿Te gusta el arte, música, pintura, esculturas? ¿Te refugias en realidades alternas o paralelas al ritmo de música?
Bien. Si alguna de estas preguntas fue respondida con un sí, o todas porque, somos iguales si es que estás leyendo esto, bienvenido a una pequeña introducción del nirvana.
Y no, no necesitas ser un metodista para alcanzar el estado de relajación. Es bastante sencillo.
Una persona pudo hacerlo, sin ahondar mucho en sus alrededores, sino en él mismo. No queremos que seas como él, solo marcó un camino para que tú y muchos que se sienten como tú, encuentren un refugio en este mundo lleno de mierda, propagandistas, infieles, seres sin palabra, falsos, sin amor…
Lo primero que debes hacer es blanquear tu mente, tu alma, tus oídos y dejar de escuchar lo que todo el mundo quiere que hagas. Todo humano debe seguir una línea de vida, impuesta por una ley natural: nacer, crecer, reproducirse y morir. 4 pasos simples, ¿no crees?
En el nirvana, nos enseñaron pasos muy distintos, los cuales no vienen dentro del paquete que te mostraron cuando estudiabas ciencias naturales en la escuela: nacer, crecer, independizarte, sufrir, cambiar, sufrir, enamorarte, sufrir, intentar reproducirte, sufrir, madurar, sufrir, morir… y dejar de sufrir.
No suena divertido, ¿verdad?
Bueno, esa es la vida real. ¿Ves que los 4 pasos no son tan simples como se pronuncian?
Esa es la dificultad del propagandismo. Hoy estás en un grupo, generando algo, mañana está harto de ello, porque estás aburrido y viejo. Al principio nadie te escucha, te haces escuchar y quien lo hace, cambia y modifica la forma de pensar.
Siempre los sonidos crudos son difíciles de digerir, pero escucha algo diferente, te sorprenderá lo que puedes encontrar ahí.
Pinturas en la habitación, acordes sin sentido, aneurisma e insecticida nacional, mundial y nadie se entera de que mueren por el mismo veneno.
No hay mentalidad, o tal vez ya nada importa en una segunda etapa en el nirvana. Con las luces apagadas, es aún más divertido y peligroso. No estarás solo, habrá mucho dentro, entreteniéndose. Parece algo estúpido pero es tan contagioso. Es contagioso porque no es normal ni tampoco es real. Solo sigues sin sentirlo.
Ven sin importar la disposición que tengas, te divertirás al final del día.
El nirvana también es un sitio que te permite enamorarte sin necesidad de sufrir, o si quieres sufrir, bueno, el estado depende de cada quien. Oculta tu corazón en una caja con la misma forma, más o menos una semana y podrás dejar de sentir eso que los humanos llaman amor.
Enciende la radio o déjala apagada. En fin, la mierda se propaga por los mismos medios. No los escuches si no lo ves necesario.
¿Entiendes lo que digo?
Ve más allá y profundiza tus pensamientos. Pronto hallarás la calma.
Puedo recomendarte un té “Pennyroyal”, por si requieres beber mientras encuentras un camino de paz y tranquilidad.
Encontrarás que hay muchos surcos en tu mente, gente de distintos gustos sexuales, dioses falsos, lo que debió pero no fue. No intentes disculparte. Pasa el tiempo y ya estás a punto.
Recuerdos van y vienen. ¿Qué más da si los eliminas? El objetivo del nirvana es limpiar tu mente y volver como otro. El mismo Jesús te tendrá envidia, y no te verá como un rayo de sol en la tierra, tal vez serás como el hombre que vendió al mundo. ¿El precio? Dejar de sufrir
Dime, tan solo dime si pasarás bien la noche.
Dime, tan solo dime si dormirás bien por la noche.
En el ático, en el ático, donde el sol suele no brillar.
Tendrás calosfríos toda la maldita noche…
Pero dejarás de amar, de sentir, de ser… tú. Nacerá algo diferente.
Sabes que solo tú estás correcto.
Una vez que ilumines por completo la mente, podrás observar algo distinto por las mañanas en el espejo, alguien, como dirían algunos, un ser “X”, sin nombre, posición social, estatus económico o político.
Si sales del nirvana, de una mente en blanco con éxito, podrás forjarte un nuevo futuro. Lo que no sale, es mejor extinguirlo de golpe.