Fragmentos de horror: El arte del horror.

Para captar la escencia, el artista debe hacer un impecable trabajo parahacer sobresalir el punto máximo de la catársis.
Así lo hizo Antonio.
Llevó a su reina, a la dama que se prestó para su acto.
Sin pensarlo, le colocó primero la corona y de inmediato, de un tajo y con un cuchillo le arrancó parte del rostro. La chica gritó de dolor, pero él continuó con el resto de su obra.
Al finalizar, lo pudo ver.
La muerte reflejada en el cuerpo de una dama.
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