Fragmentos de horror: ¡Las rosas hay que pintar!

"¡Que le corten la cabeza!"

Alicia tras su sueño, recordaba el oscuro paraje en el país de las maravillas, del cual, una simple pesadilla, la marcó de por vida.

Caminaba por los verdes campos de Londres, algo extraviada, buscando al conejo blanco para saber si es que de verdad ella está con vida o intenta vivir.

A lo lejos, una señora, alta y gorda, le saludó. Su aspecto igual al de la reina roja. Su patio, lleno de rosas blancas.

Alicia en su cabeza recordaba la pesadilla.

"Que le corten la cabeza... Que le corten la cabeza... Que le corten la cabeza... ¡Que le corten la cabeza!"

Alicia lentamente se acercó:

"¡Que le corte la cabeza! Las rosas... Las rosas... Blancas... Las rosas hay que pintar!"

Entonaba una linda y dulce canción, mientras se avalanzó sobre la señora, para saciar su sed de vida y obtener la pintura para las rosas blancas...

"Las rosas hay que pintar... pintarlas de carmín".

Cantaba Alicia...